jueves, 28 de febrero de 2008

Contigo

Y seguimos con Sabina...

Yo no quiero un amor civilizado,
con recibos y escena del sofá;
yo no quiero que viajes al pasado
y vuelvas del mercado
con ganas de llorar.

Yo no quiero vecinas con pucheros;
yo no quiero sembrar ni compartir;
yo no quiero catorce de febrero
ni cumpleaños feliz.

Yo no quiero cargar con tus maletas;
yo no quiero que elijas mi champú;
yo no quiero mudarme de planeta,
cortarme la coleta,
brindar a tu salud.

Yo no quiero domingos por la tarde;
yo no quiero columpio en el jardín;
lo que yo quiero,
corazón cobarde,
es que mueras por mí.

Y morirme contigo si te matas
y matarme contigo si te mueres
porque el amor cuando no muere mata
porque amores que matan nunca mueren.

Yo no quiero juntar para mañana,
no me pidas llegar a fin de mes;
yo no quiero comerme una manzana
dos veces por semanasin ganas de comer.

Yo no quiero calor de invernadero;
yo no quiero besar tu cicatriz;
yo no quiero París con aguacero
ni Venecia sin ti.

No me esperes a las doce en el juzgado;
no me digas “volvamos a empezar”;
yo no quiero ni libre ni ocupado,
ni carne ni pecado,
ni orgullo ni piedad.

Yo no quiero saber por qué lo hiciste;
yo no quiero contigo ni sin ti;
lo que yo quiero,
muchacha de ojos tristes,
es que mueras por mí.

Y morirme contigo si te matas
y matarme contigo si te mueres
porque el amor cuando no muere mata
porque amores que matan nunca mueren.

martes, 26 de febrero de 2008

Ahora que...

Bueno, otra vez Sabina. Esta canción siempre me ha gustado mucho, pero no le había prestado mucha atención, pero ahora la entiendo mucho.

Ahora que nos besamos tan despacio,
ahora que aprendo bailes de salón,
ahora que una pensión es un palacio,
donde nunca falta espacio
para más de un corazón…

Ahora que las floristas me saludan,
ahora que me doctoro en lencería,
ahora que te desnudo y me desnudas,
y, en la estación de las dudas,
muere un tren de cercanías…

Ahora que nos quedamos en la cama,
lunes, martes y fiestas de guardar,
ahora que no me acuerdo del pijama,
ni recorto el crucigrama,
ni me mato si te vas.

Ahora que tengo un alma
que no tenía.
Ahora que suenan palmas
por alegrías.
Ahora que nada es sagrado
ni, sobre mojado,
llueve todavía.

Ahora que hacemos olas
por incordiar.
Ahora que está tan sola
la soledad.
Ahora que, todos los cuentos,
parecen el cuentode nunca empezar.

Ahora que ponnos otra y qué se debe,
ahora que el mundo está recién pintado,
ahora que las tormentas son tan breves
y los duelos no se atreven
a dolernos demasiado…

Ahora que está tan lejos el olvido,
ahora que me perfumo cada día,
ahora que, sin saber, hemos sabido
querernos, como es debido,
sin querernos todavía…

Ahora que se atropellan las semanas,
fugaces, como estrellas de Bagdad,
ahora que, casi siempre, tengo ganas
de trepar a tu ventana
y quitarme el antifaz.

Ahora que los sentidos
sienten sin miedo.
Ahora que me despido
pero me quedo.
Ahora que tocan los ojos,
que miran las bocas,
que gritan los dedos.

Ahora que no hay vacunas
ni letanías.
Ahora que está en la luna
la policía.
Ahora que explotan los coches,
que sueño de noche,
que duermo de día.

Ahora que no te escribo
cuando me voy.
Ahora que estoy más vivo
de lo que estoy.
Ahora que nada es urgente,
que todo es presente,
que hay pan para hoy.
Ahora que no te pido
lo que me das.
Ahora que no me mido
con los demás.
Ahora que, todos los cuentos,
parecen el cuento
de nunca empezar.

lunes, 18 de febrero de 2008

Locos de atar

Mmm, últimamente entiendo taaaaaaaaanto esta canción. Sabina es un genio.

Estábamos en lo mejor
cuando sonó el despertador
como un jarro de agua fría.
El vino dulce del placer
se avinagró sobre tu piel
y la mía.
De nueve a dos,
de cuatro a seis,
yo, que he nacido para rey
trabajando por dinero…
¿Y si te quitas el jersey
y nos sacamos otra ley
del sombrero?

Diles que no
piensas fichar,
pon el reloj
a la hora de los locos
de atar.

El lunes es el día peor,
bailar con un ordenador
el bolero del masoca.
Volviéndole la espalda al mar,
sin un mal beso que llevarse
a la boca.
La fuerza de la gravedad
del cielo nos exiliarác
uando subas la persiana…
¿Por qué no hacemos el amor
y tiras esa ropa porla ventana?

Diles que no
piensas fichar,
pon el reloj
a la hora de los locosde atar.

martes, 12 de febrero de 2008

Bahía

Una canción de Pedro Guerra que me gusta mucho.



Como el sol en la bahía,
cuando el mar bebe su fuego
y la noche su alegría.
Como casa como guía,
como faro de los puertos,
como luz de mediodía,
como el aire de los muelles,
con el hilo de las cañas
y el olor a sal y peces.


Como harina
como pan
algo bueno que no pides
y se da
cielo limpio cielo azul
como todo
si estás tú.

Como el día que amanece
con la luz abriendo paso
entre las calles y la gente,
cosa tibia que se mueve
por la luna de mis labios
agua y musgo de la fuente.
Como flor en los balcones,
como helecho de los patios,
despertar de las canciones.

Como harina como pan
algo bueno que no pides
y se da
cielo limpio cielo azul
como todo
si estás tú.

lunes, 11 de febrero de 2008

Hoy

Una canción de Rosana. No mucho que decir, suspiros...

Déjame estar de frente a la mañana
que no se cansa nunca
de vernos despertar
Déjame andar al centro del milagro
y ver que a cada rato
te quiero un poco más

Ay ... lere ... tengo el corazón del mundo
cuando tú me das la vida
Ay ... lere ... y hoy no me levanto
por más que me lo pidan porque

Hoy no tengo ganas de cambiar el rumbo
hoy no tengo fuerzas pa´subirme al mundo
hoy me quedo entre tu piel
Hoy no tengo ganas de cambiar el rumbo
no tengo fuerzas pa´subirme al mundo
hoy me quedo donde estés
tejiéndonos la piel
con cosas del querer

Quédate ahí en medio de las prisas
envuélveme en caricias
los besos que te di
Y déjame perder el equilibrio
jugando a darte el mundo
y a hacerte sonreír

Ay ... lere ... tengo el corazón del mundo
cuando tú me das la vida
Ay ... lere ...hoy no me levanto
por más que me lo pidan porque

Hoy no tengo ganas de cambiar el rumbo
hoy no tengo fuerzas pa´subirme al mundo
hoy me quedo entre tu piel
Hoy no tengo ganas de cambiar el rumbo
no tengo fuerzas pa´subirme al mundo
hoy me quedo donde estés
Ay ... lere ... tengo el corazón del mundo ...
Hoy no tengo ganas de cambiar el rumbo ...

sábado, 2 de febrero de 2008

En la ciudad de la furia

Aunque no estoy en Buenos Aires, esta es la canción. Sigo llenando la mochila de nuevos y buenos recuerdos.

Me verás volar
por la ciudad de la furia
donde nadie sabe de mí
y yo soy parte de todos.

Nada cambiará
con un aviso de curva.
En sus caras veo el temor
ya no hay fábulas
en la ciudad de la furia.

Me verás caer
como un ave de presa.
Me verás caer
sobre terrazas desiertas.
Te desnudaré
por las calles azules.
Me refugiaré
antes que todos despierten.
Me dejarás dormir al amanecer
entre tus piernas
entre tus piernas.
Sabrás ocultarme bien y desaparecer
entre la niebla
entre la niebla.
Un hombre alado extraña la tierra.

Me verás volar
por la ciudad de la furia,
donde nadie sabe de mí
y yo soy parte de todos.
Con la luz del sol
se derriten mis alas.
Solo encuentro en la oscuridad
lo que me une con la ciudad de la furia.

Me verás caer
como una flecha salvaje.
Me verás caer
entre vuelos fugaces.
Buenos Aires se ve tan susceptible.
Ese destino de furia es
lo que en sus caras persiste.

Me dejarás dormir al amanecer
entre tus piernas
entre tus piernas.
Sabrás ocultarme bien y desaparecer
entre la niebla
entre la niebla.
Un hombre alado prefiere la noche.
Me verás volver.
Me verás volver
a la ciudad de la furia.